Carta abierta a Rubén Giustiniani

Carta abierta A Rubén Giustiniani

Quien cuida los modales pero rechaza la mentira, se asemeja a alguien que,
si bien se viste a la moda, no lleva camisa. (Walter Benjamín)

Las formas de la mentira, la de las patas cortas

No es necesario un estudio sociológico sobre la mentira para comprender que en el debate de las ideas muchas veces se recurre a ella para justificar posiciones, ocultar evidencias, tapar debilidades o simplemente esquivar el debate mismo. La peor de todas es la mentira oculta, aquella que adquiere los más inesperados rostros, la que se arropa de inocente verdad. La que viste a la rosa de hierro.

El sábado pasado debía realizarse el congreso nacional del partido socialista convocado al solo efecto de intervenir el distrito bonaerense y eliminar mecanismos de participación democrática como son la supresión del Concejo Federal, la eliminación de las corrientes internas y la elevación de 100 a 500 firmas para la presentación de listas internas.

Ninguna de estas propuestas son producto del consenso interno, es decir del debate de todos los militantes socialistas. Nada de esto sucede, lamentablemente desde hace unos años en que un reducido grupo de dirigentes, cual secta de mormones se ha atrincherado en la conducción nacional del PS y desde allí pretenden fulminar a todo militante, sector o dirigente que ose matizar posiciones políticas.

Es grave, que luego de pocos años desde la reunificación partidaria, se pretenda conducir a un partido en crecimiento, plural y con vertientes diversas, enhorabuena que así lo sea, desde un reducido grupúsculo que no escucha a las bases, ni a las Federaciones Socialistas Provinciales que tienen opiniones para expresar. No es posible concebir el socialismo, como idea, como proyecto y como partido si no es a través de una visión constitutivamente plural.

Nuestra Federación, la de la provincia de Buenos aires, tiene diferencias con este grupo, siempre las hemos expresado públicamente, y por ello no pedimos la expulsión, ni la intervención de aquellos que no coinciden con nosotros. Hemos realizado dos congresos provinciales, innumerables reuniones de base en los centros socialistas, de juntas municipales, reuniones de juntas seccionales, de junta ejecutiva provincial y del concejo provincial, todos organismos democráticos, desde hace más de un año para decidir por amplia mayoría nuestro acompañamiento a esta experiencia de gobierno.

Ese grupo de dirigentes encabezado por usted, Ruben Giustiniani, que voto la ley de flexibilización laboral del gobierno de De La Rua, (y, que conste en actas, por ese lamentable error no hemos pedimos su expulsión) se niega a consultar a las federaciones provinciales de nuestro partido para fijar la posición nacional del partido y esquiva toda posibilidad de un franco debate, abierto y sin cortapisas.

Le tienen miedo a la democracia, al disenso interno, su método es el centralismo antidemocrático, algo así como un leninismo de derecha (con el perdón de Ilich)

Les proponemos abrir el debate. Estimado Ruben Giustiniani, te proponemos que debatamos libremente entre todos los militantes y federaciones del partido socialista sobre cual debe ser la línea política que debe seguir el partido y luego busquemos una síntesis. A ninguna Federación se consulto previamente sobre el acuerdo con Carrió y su séquito de derecha.

Te proponemos imitar lo realizado recientemente por el Frente Amplio de Uruguay, donde 508 comités de base, símil de nuestros centros socialistas, en los cuales participaron 30.000 militantes frenteamplistas, decidieron sobre el curso a seguir por esa fuerza política de izquierda.

En la ciudad de Rosario, gobernada exitosamente por el socialismo desde 1989, se ha puesto en marcha el presupuesto participativo, herramienta democrática por medio de la cual todos los vecinos pueden opinar y decidir sobre el curso de la gestión municipal. Te proponemos que impulses el presupuesto participativo partidario como método de consulta a los afiliados socialistas y que elimines a la secta mormónica como ente decisorio, que pretende desde una mesa de café de Rosario decirnos a los socialistas tucumanos, entrerrianos, santafecinos, bonaerenses, sanjuaninos, santacruceños, etc, lo que debemos hacer y acatar sin contemplaciones.

Vos lo podes hacer, estimado Rubén, con un poco de tolerancia, de altura moral y cintura política. Podrías conducir un partido socialista realmente democrático y popular y no una claque de gorilas, y sectarios que no se bancan la diferencia, el matiz, la pluralidad. Vos sabes que todos los proyectos de construcción socialista unanimistas terminaron en el tacho de basura y que se cometieron enormes barbaridades en nombre de la verdad única, del partido omnipoderoso y de esa gavilla de mesiánicos en que terminan transformándose los círculos cerrados de poder.

Seria lamentable que a poco de andar, volvamos a las divisiones socialistas que tan mal le han hecho al país. Desde la provincia de Buenos Aires te bancaríamos, porque nuestro criterio democrático es el de Rosa Luxemburgo y no el de José Stalin.

La rosa no puede vestirse de hierro.

Ahora que vamos despacio,
vamos a contar mentiras,
vamos a contar mentiras.
Por el mar corren las liebres,
por el monte las sardinas
por el monte las sardinas...
Canción popular

Julio C. D. Fornelli
Delegado al Congreso Nacional
Centro Socialista Temperley
Lomas de Zamora
Provincia de Buenos Aires